24 de mayo de 2011

Museo Los Pinchudos y su trágica orfandad.

El pasado 18 de Mayo en todo el mundo se celebró el día internacional de los Museos, sin embargo para la gran mayoría de peruanos esta conmemoración pasó desapercibida. Como sabemos, un Museo es un espacio donde se exhiben objetos o curiosidades que resultan atractivos al interés público y que aglutina por lo general desde piezas históricas, pasando por objetos científicos, artísticos y bienes de gran valor cultural. En América Latina, nuestro país es uno de los pocos privilegiados en contar con una rica historia precolombina, lo cual nos ubica como responsables directos de la preservación de todo aquél vasto patrimonio cultural de pertenencia no sólo peruana sino de toda la humanidad. Empero, cuán conscientes somos de la magnitud de esa responsabilidad. Reza un refrán: “… nadie llega a querer lo que no conoce”, es por ello que sólo conociendo más nuestra historia aprenderemos a descubrir mejor el país que nos alberga y por ende llegaremos a valorarlo y respetarlo como se merece. Entre otras finalidades, esa es la misión de un Museo, conservar viva la memoria de nuestro devenir histórico, conservar todos aquellos bienes culturales que son expresión latente de lo que fuimos y somos para sabiamente proyectarnos en el tiempo.
Pero poco o nada nos sirve conocer todo esto en teoría si en la práctica no se le da la debida importancia a nuestros Museos. Es el caso de Juanjui en la Provincia de Mariscal Cáceres donde existe el Museo Los Pinchudos (en alusión a unas estatuas encontradas en el complejo arqueológico Gran Pajaten) y que si no fuera por la labor desinteresada de su fundador, el Lic. Oliver Tarazona, simplemente ya hubiera dejado de abrir sus puertas al público hace buen tiempo. El Museo en mención posee piezas valiosísimas del legado histórico de Mariscal Cáceres que han venido siendo adquiridas por su fundador desde hace varios años, pero dado que no cuenta con los recursos económicos suficientes para la preservación de objetos tan delicados ni con mostradores adecuados para evitar que sean sustraídos, es que desde hace varios años viene prácticamente mendigando apoyo, toda vez que hay una indiferencia de la sociedad en general con respecto a estos temas, por ello hago un llamado al Alcalde de Juanjui para que declare en emergencia la situación del único Museo con que cuenta la ciudad.
Además, cabe mencionar que existe interés de una Universidad Privada establecida en Tarapoto por adquirir todo el conjunto de objetos y piezas que conforman el Museo para ser trasladado a la ciudad de las palmeras, oferta que el fundador ha rechazado porque no lo considera correcto y además porque mantiene la esperanza de que la actual gestión edil destine un fondo para la vigencia del Museo Los Pinchudos.
Desde esta tribuna coincido con la importancia de crear un fondo municipal destinado a la preservación de lo nuestro, porque es inconcebible que en Juanjui nos jactemos de ser cuna del Gran Pajaten (prefiero el término: “Heredera histórica del G.P.”) y por otro lado hacernos de la vista gorda ante el llamado de auxilio de ese espacio cultural.

2 comentarios:

Siore dijo...

Acabo de leer tu último post y tienes toda la razón. En Juanjuí existe sólo un museo, al cual nadie le toma el interés que amerita el mismo, algo muy lamentable ya que es uno de los lugares en el cual podemos apreciar y conocer nuestro devenir histório de una forma más cercana. Espero las autoridades tomen las medidas necesarias para ayudar a su mejoramiento y su fomentación y si es así, Victor, tú como vicepresidente del frente cívico de nuestra ciudad se el ejemplar en ello y demuestra a aquellas personas que dicen ser autoridades, que un verdadero juanjuino no se dice llamar asi porque nació ahi, sino por las cosas que hace por ella para que mejore día a día.

Saludos a la distancia.

Anónimo dijo...

Efectivamente mi querido raul , tu siempre dando en el clavo con los temas de desinteres social, "entiedanse bien", muchas de tus palabras son ciertas, pero justamente ahi es donde debemos ver el otro lado, es que no solo esperemos que las autoridades locales hagan algo por el patrimonio, pues nosotros mismos, como personas natas de esa hermosa tierra, formemos grupos de apoyo y busquemos en la entidades privadas ese apoyo que justamente requiere Nuestro Museo, que por cierto es uno de los tantos olvidados por nosotros mismos, en juanjui existen muchas empresas privadas con las que podriamos gestionar el reflote del museo.